McBratney, Sam y Anita Jeram: Adivina cuánto te quiero, Kókinos.
"Era la hora de dormir. La liebre pequeña color de avellana se agarraba fuertemente a las orejas de la gran liebre color de avellana".
Así comienza este libro que trata de la relación entre una liebre grande y una liebre pequeña. En principio, la liebre grande no se identifica con la figura del padre o de la madre, pero McBratney afirma "mi padre murió antes de que yo empezara a escribir, el padre de mis historias tiene una voz y una presencia en la que se reconocería mi padre". A partir de una estructura sencilla y repetitiva, el autor irlandés consigue escribir una delicada y amena historia de afectos, complementada con las suaves acuarelas de Jeram.
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ResponderEliminarComo bien dice Ramón, este autor, a partir de una estructura sencilla y repetitiva consigue enternecernos a todos. Creo que es un cuento que se puede aprovechar desde edades tempranas como podrían ser tres años y también en edades más avanzadas; hasta me atrevo a decir que puede llegar a entusiasmar a los adultos por toda la emoción que transmite, de hecho conmigo lo ha conseguido.
ResponderEliminarUn aspecto que me ha llamado la atención es el que ya se ha mencionado. El autor, en el libro en ningún momento explicita que la liebre grande es el padre de la liebre pequeña. Es un aspecto que no menciona pero que se puede sobreentender perfectamente por el lector (no solo por la frase que afirma que su padre murió antes de que aprendiese a leer) pues representa el amor que existe entre un padre y un hijo y no solo los adultos somos capaces de darnos cuenta de este detalle.
Por último, resaltar que pienso que es un libro que nos puede dar mucho juego para trabajar en el aula el tema de las emociones; es muy enternecedor y nos puede servir de gran ayuda porque estoy segura que a los niños les encantará. El éxito del libro es una prueba de ello.
Saludos =)
Rocío Follana Antolín
Este libro principalmente, tiene una gran carga afectiva, tanto por sus palabras como por sus dibujos que expresan los sentimientos de los personajes.
ResponderEliminarAdemás, tiene una estructura sencilla que ayuda a la comprensión de la historia.
Es un libro que puede llegar a gustar tanto a los más pequeños de infantil como a los más mayores.
Sin duda es un libro interesante para tener en la biblioteca de nuestra futura aula.
Cristina Valero Maciá
Este libro me ha gustado mucho a pesar de lo ñoño que pueda parecer, la manera tan tierna con la que el autor muestra el amor entre las dos liebres es absolutamente preciosa. Para trabajar en el aula considero que podría darnos mucho juego, al mismo tiempo que los padres en casa podrían leérselo a sus hijos y jugar a demostrarse lo mucho que los quieren ellos. Recomiendo personalmente este cuento porque considero que es una obra de literatura infantil que tiene un gran valor gracias a la sencillez del lenguaje utilizado, su fácil comprensión, la corta longitud del texto y a las imágenes que tanto en el color como en el trazo son muy suaves y acertadas para la etapa de infantil.
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