El caballo de cartón azul: Entradas en azul. Amandine Laprun. Arbre. Actes Sud Junior

Título: Arbre

Autora e ilustradora: Amandine Laprun

Editorial: Actes Sud

Año: 2017

Páginas: 48

Encuadernación y formato: 16 x 17 cm. Tapa dura.

Idioma: francés. Sin palabras

Reseña:

Finalizamos la semana con una reseña que abre nuevas temáticas para futuras entradas y que sigue con el reflejo de la naturaleza en la LIJ. Un centro de interés para los primeros lectores, un páramo en el que se encierran historias y la necesidad antropológica que proviene desde la tradición oral, las fábulas, las leyendas en sus diferentes vertientes y el imaginario colectivo como el espacio donde la narrativa ha tenido un referente ineludible. Con la industrialización y la evolución hasta las sociedades posmodernas, la naturaleza también es un espacio de evocación, pese a que los parques son parte de nuestro entorno, pero exentos de la salvaje placidez del entorno rural. El cambio, el ciclo y la idea intangible del tiempo que encuentra en la naturaleza el páramo en el que ejemplificar, nada más y nada menos, la vida.

Con Arbre de Amandine Laprun conectamos con muchos títulos y árboles en formato álbum en la LIJ, como el clásico Las estaciones (L’albero) de Iela Mari, una autora que supo reflejar esas historias cíclicas del paso del tiempo en la naturaleza, desde la atalaya de un punto fijo en el que materializar ese paso del tiempo. Como objeto, la exploración de la materialidad del álbum por parte de Amandine Laprun tiene una significación evidente al representar el objeto esa característica cíclica con un álbum en formato 360º que se despliega representando el árbol. Un formato que nos recuerda a Snowhite 360 de Yusuke Oono y que el formato es narrativo y carece de texto. En el árbol vemos el florecer del cerezo y en el que aparecen como visitantes las aves, los insectos, los rayos de luz y la infancia recolectando sus frutos. También vemos crecer en el tronco las setas, la caída de las hojas, el refugio para la imaginación y su desnudez ante los elementos al llegar el invierno. Finalmente, vuelve a iniciarse el ciclo y la vida retoma su camino. Un álbum con un formato atractivo, sencillo y efectivo.

A esa temática, hay ejemplos narrativos como Petit Arbre/Little tree de Katsumi Komagata o El árbol de los recuerdos de Britta Teckentrup que emplean el árbol para hablar del ciclo de la vida humana, del ocaso y del legado. En futuras entradas exploraremos más aspectos sobre este ciclo vital, pero las semillas (para que crezcan árboles o flores) también han sido las invitadas para mostrar esta perspectiva y trazar alegorías con el ocaso como Ver la luz de Emma Giuliani, Una pequeña semilla de Mar Benegas de Neus Caamaño en formato acordeón, como Un jardín de María José Ferrada e Isidro Ferrer y una autora que se apoya en la naturaleza para mostrar ese paso del tiempo (El árbol de las cosas). Tantas otras referencias se amontonan, pero mejor dejarlas para más adelante. Mientras, disfrutamos leyendo y apreciando la vida (con sus ausencias).