Los cinco desastres
por Sandra Martínez Sánchez
Alemagna,
Beatrice (1983). Los cinco desastres.
A buen paso
Los cinco desastres es un álbum ilustrado que nos cuenta la
historia de cinco personajes divertidos y entrañables que son, como dice el
título, un auténtico desastre. Sin embargo, viven felices y cómodamente entre
ellos hasta que un día llega don Perfecto, un ser ególatra, presumido y
sumamente perfeccionista que desprestigia a nuestros cinco amigos por sus “defectos”.
Este suceso los entristece hasta que se dan cuenta de que sus imperfecciones son
las cosas que los hacen únicos y especiales y les ofrecen la posibilidad de
tener habilidades que otros no poseen. Así pues, al contrario de lo que
esperaba don Perfecto al rechazarlos por ser unos desastres, se dan cuenta de
lo magníficos que pueden ser tal y como son.
De
esta manera, se nos presenta una historia sobre las imperfecciones y las
rarezas, sobre la importancia de valorarse a uno mismo y dejar de lado las
opiniones de los demás. Todo ello con un tono desenfadado y con algunos toques
de humor tanto en el código escrito como visual, que sin duda conseguirán
captar la atención de los más pequeños.
Las
ilustraciones de la obra, son, al igual que nuestros personajes, un desastre.
Pero en este caso, un desastre brillante. A lo largo de las páginas de este
álbum ilustrado vemos diferentes imágenes que muestran el caos reinante en la
casa de los cinco desastres a través de diferentes técnicas de dibujo y
materiales que proporcionan al lector una visión un tanto caótica. Esto nos
ayuda a comprender mejor el texto, las características de cada protagonista y
el desastre en el que se ven inmersos. De este modo, las ilustraciones
complementan a la perfección el código escrito, el cual deja entrever las
personalidades y los acontecimientos que ocurren a lo largo de la historia,
pero son las imágenes las que nos aclaran los sucesos y los complementan.
Por
tanto, esta obra de Beatrice Alemagna, nos muestra la importancia de quererse a
uno mismo y de no desmerecer a nadie. Nos enseña que todos tenemos rarezas,
singularidades, y que son estas características las que nos hacen únicos y
especiales, son estos pequeños “defectos” los que nos convierten en las
personas que somos, porque también nos otorgan grandes virtudes. Todo ello,
acompañado de un texto de calidad y unas ilustraciones que nos atrapan e
invitan a leer la historia desde temprana edad tanto en las aulas como en
familia, lo convierten en un álbum ilustrado que debería estar presente en las
aulas y en los hogares.