Hace
unas cuantas entradas en el blog, dedicamos un especial de tres entradas a Arnal
Ballester y, esta semana, el turno es para Antonio González (Alicante, 1974) artista (pintor y escultor),
ilustrador y profesor del Máster
de Ilustración Profesional de Valencia. Recientemente, también ha realizado
una campaña publicitaria para la marca Reebok x The Animals Observatory y en
esta entrada nos centraremos en un repaso por sus diferentes publicaciones en
formato álbum.
En
los últimos tiempos he sentido una gran curiosidad por su propuesta artística y
literaria dentro de mi formación académica, por lo que esta semana dedicaremos
tres entradas al repaso de las características de sus libros. En esta primera,
nos centraremos en tres álbumes editados en diferentes editoriales donde
observaremos el progreso en el uso de los elementos de la ilustración, la
experimentación con la narrativa en el texto y el formato. La entrada de mañana
dedicada a tres álbumes publicados en la editorial Fulgencio Pimentel e hijos
y, el viernes, una entrada final con su último título publicado y más
información sobre las motivaciones de mi fijación y admiración por su
propuesta. La agrupación no se corresponde a un orden cronológico, sino a la
agrupación de los trabajos en las editoriales que se han publicado sus libros.
Comenzamos. Aviso previo: por mucho que estas entradas introduzcan referencias a la investigación académica, sus álbumes están pensados para el placer. Un aspecto esencial dentro del interés por sus libros.
Título: ¡Oh! ¡Un zig-zag!
Autor
e ilustrador: Antonio
Ladrillo
Editorial: Silonia
Año: 2016. Primera edición: Paga Extra,
2012
Páginas: 32
Encuadernación
y formato:
21 x 21 cm. Tapa dura.
Idioma: castellano
Reseña:
En este primer álbum editado en Silonia en 2016, Antonio Ladrillo experimenta
en su narración con ideas sobre elementos básicos del lenguaje universal:
color, forma y número. Esto, resulta una visión reduccionista como simple
descripción, a la que añadimos la composición y el ritmo para establecer
relaciones con el movimiento De Stijl (me encanta su frase en el Prefacio II de
su manifiesto: El fin de la naturaleza es el hombre. El fin del hombre es el
estilo) y, en el formato álbum con Paul Rand, así como la manera en que las
imágenes son capaces de narrar como Molly Bang plantearía en Picture This:
How Pictures Work (2000), cuya primera edición es de 1991. En ese libro,
Bang estructura en la narración de Caperucita roja mediante el uso de formas y
el proceso mediante el que somos capaces de reconocer emociones dependiendo de
la interpretación y recepción de las imágenes. A partir de elementos
universales y mínimos, alcanzar una comunicación integral. En este libro, Bang exploraba
en diez principios las sensaciones perceptivas según el empleo de líneas
horizontales y planas (estabilidad y calma), verticales (energía y dinamismo
que se revela contra la gravedad) o diagonales (dinamismo al implicar movimiento
y tensión). Ejemplos propuestos que además afectaban a la posición del objeto
en la página y que sirven como preámbulo perfecto para explorar este álbum.
Otras de las características de Antonio Ladrillo son las
expresiones (ojos y boca) que acompañan a sus diferentes títulos y nos
introduce en la sensación de control de elementos mínimos y recurrentes para
introducirnos (como si fuera una composición musical minimalista) en sus libros
como movimientos en los que se alteran los elementos visuales para la creación
de narrativas que se atienden a la restricción o ampliación de estos. Color,
forma, número, composición, ritmo, expresiones y universalidad como signo
distintivo de la expresión del arte abstracto.
Con formato cuadrado y el empleo de cinco colores (azul, rojo, amarillo, verde y rosa) y prescindiendo del trazo para centrarse en la forma, las expresiones y las miradas de estas formas que se disponen en la página de manera armónica no son un ejercicio didáctico sobre el aprendizaje de las formas (será una trampa reduccionista como mediadores literarios que entendemos los libros como un elemento instrumentalizado y no como experiencia). La primera página, con cuatro cuadrados ocupando las esquinas y dejando el centro en blanco, sus sonrisas y miradas que implican la dirección a un texto que redunda en la imagen y que nos invitan a seguirlos en su progresión. Estos ejemplos propuestos por Molly Bang se pueden comprobar en las sensaciones que generan las diferentes imágenes con tamaño, color y forma que se suceden desde la placidez de sus expresiones y un zig-zag al que alude el título que se hace más evidente con el uso de las líneas y el movimiento de ojos del lector, la direccionalidad en las curvas en el arco-iris o la progresión en las esquinas, el punto central cuando señalan al centro y el placer final de verlas ondular. Una narración divertida y visualmente emocionante. Un libro que fue la puerta de entrada hace unos años a un universo artístico en progresión.
Web Antonio Ladrillo
https://www.antonioladrillo.com/
Instagram Antonio Ladrillo
https://www.instagram.com/antonioladrillo/?hl=es
Web Antonio González
https://www.antoniogonzalez.me/
Canal VIMEO
Referencias
Bang, M. (2000). Picture this: how pictures work. SeaStar Books.
Bisquerra Alzina, R., Pérez González, J., & García Navarro, E. (2015). Inteligencia emocional en educación. Síntesis.
Mociño González, I. (2019). Libro-obxecto e xénero. O libro infantil como artefacto. Servizo de Publicacións da Universidade de Vigo
Munari, B. (1983). ¿Cómo nacen los objetos? [apuntes para una metodología proyectual]. Gustavo Gili.
Ramos, A. M. (ed.) (2017). Aproximações ao livro-objeto: das potencialidades criativas às propostas de leitura. Tropelias & Companhia.
Tabernero Sala, R. (2019). El objeto libro en el universo infantil. Prensas de la Universidad de Zaragoza.
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